Hoy vamos a explorar juntos un emocionante capítulo en la vida de los peques: las rabietas a los 2 años. ¡Tranquilos, estamos en esto juntos! En esta travesía, vamos a descubrir cómo afrontar las rabietas desde un lugar lleno de amor y comprensión, inspirándonos en métodos educativos que valoran a los niños como seres únicos. ¿Listos para sumergirse?
Entendiendo las Rabietas: ¡Es todo parte del crecimiento!
Primero y ante todo, respiremos profundamente. Las rabietas son como pequeñas tormentas emocionales que indican que nuestros chiquitines están descubriendo su mundo interior. ¡No te preocupes! Vamos a abordar esto con empatía y paciencia, recordando que es una etapa normal de su desarrollo y que existen herramientas como las del método Montessori que nos ayudarán en esta etapa.
Consejos Cariñosos para Manejar las Rabietas:
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Empatía en Acción: Cuando un berrinche asome, en lugar de apagar el fuego, acérquense. Siéntate a su altura, míralo y dile suavemente: "Veo que estás un poco frustrado. ¿Cómo puedo ayudarte?".
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Opciones y Libertad: A todos nos gusta tener un poquito de control. En lugar de imponer, ofrece opciones limitadas para que puedan tomar decisiones pequeñas. "¿Prefieres este juguete o aquel?".
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Ambiente Seguro: Transforma su espacio en un refugio acogedor. Organiza los juguetes al alcance de su manita y crea un lugar donde se sienta seguro para explorar.
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Rutinas Cómodas: Los peques se sienten seguros con rutinas predecibles. Anuncia los cambios en su día con anticipación, dándoles tiempo para adaptarse.
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Cultivando el Lenguaje: Ayúdales a expresar sus sentimientos con palabras. Modela cómo poner en palabras lo que sienten y necesitan.
Otros recursos que podemos usar frente a este tipo de situaciones serían las provenientes de otros métodos educativos, por ejemplo:
- La filosofía del método Waldorf aboga por la simplicidad y la conexión con la naturaleza. Cuando llegue una rabieta, prueba envolverlo en un abrazo cálido y lleva la atención a algo tranquilo, como una vela o una melodía suave.
- Por otro lado el método Pikler fomenta la exploración autónoma. Un forma de enfrentar la situación sería, en lugar de saltar a resolver la rabieta, obsérvalo desde cerca, dándole espacio para gestionar sus emociones por sí mismo.
¿Y tú cual prefieres? Recuerda que las rabietas a los 2 años son como las pinceladas de color en el lienzo de la crianza. Con amor, comprensión y la guía de métodos educativos, estaremos navegando estas aguas con gracia. ¡Animo, papás y mamás aventureros! 🌈
Foto de Nathan Dumlao en Unsplash
